Esta semana, muy bien y usted?

Semanita buena ha sido esta. Ha sido el cumpleaños de María, el viernes he hecho el examen de economía. Ha ido bien creo yo. He aprendido más matemáticas que en cualquier otra parte. Una semana para decir que salvo cosas raras ha sido una buena y provechosa. Quizá ha faltado el descanso de otras semanas atrás pero ya se sabe que cuando hay que moverse hay que hacerlo sin parar. De todas formas tampoco ha sido una semana demasiado cargosa. Dentro de un mes estaremos en Perú, si Dios quiere y si Iberia quiere claro, todo hay que decirlo pero creo que si todo va bien asistiremos al acontecimiento del año: la boda de Igni y Carla. Creo que es de lo que más se habla, mucho más que de la crisis o del pequeño tropezón del Barça en Valencia. La semana que viene será algo más complicada. Un examen de matemáticas al cual acudo con más confianza de lo habitual pero del que como siempre no me fío en su totalidad. Y otro, el de estadística, el jueves, que, aunque podría decirse que todo irá bien, habrá que estar al loro después de los pequeños tropiezos y desacuerdos con ciertas actitudes un tanto intransigentes por parte del profesorado. Pero... así es la vida y así se la hemos contado...

La publicidad, esa vieja pesadilla necesaria.

La publicidad que nos invade es como muy escandalosa. No la dejamos ni a sol ni a sombra. Verdad es que el publicista y sus campañas tienen todo el derecho a mostrarnos hasta la saciedad lo mejor de sus productos. hoy en día todo el mundo quiere darse a conocer en el exterior porque sabe que las ventas aumentarán mucho si la mayoría de la gente los ve a través de una buena campaña publicitaria. Una campaña publicitaria sugestiva es la llave del éxito. Todo el mundo sabe que Internet es uno de los mejores caldos de cultivo de la publicidad al permitir previo poco gasto hacer una campaña muy digna puesta con todos los medios que éste ofrece. Las páginas webs y blogs personales son la fuente de todas estas campañas publicitarias que tienen como fin atrapar al navegante de la red de redes. Sutilmente le llevan a un mundo de colores, texturas y música suave para luego embaucarlo en un mundo en el que sus productos ya no compiten con nadie porque acaban no teniendo ningún tipo de competencia. La publicidad es importante, pero a la vez es engañosa, es como una lección de magia que cuando no acaba de verla se queda fascinado ante tanto truco y eso es precisamente la publicidad. Un verdadero truco. Y uno se pregunta... ¿Dónde está el truco? ¿Dónde la cámara oculta?...

Crisis de qué...

No estábamos peor hace tiempo que ahora; lo que pasa es que ahora nos lo dicen, nos lo repiten y nos lo meten por todas partes, periódicos, radio, televisión. No es verdad que el paro haya aumentado tanto a raíz de la crisis. Lo que pasa es que las cifras del INEM se han destapado apoyando a la tan orquestada crisis que parece que a algunos les favorece más que a otros. Pero nadie se ha puesto a pensar que lo que realmente está en crisis son los valores humanos; estos han entrado en recesión como se dice en términos económicos mucho tiempo antes de que la cacareada crisis invadiera nuestros hogares, y esa crisis de valores sí es importante y trascendente pues de ellos depende de que la otra crisis, la económica acabe cuanto antes o se arrastre hasta tiempos inmemoriales. ¿Por qué el mal humor humano, la gente que pierde la esperanza, la que no tiene ideales y todo eso y más, no es revisado por los "expertos"? Acaso interesa que haya un muerto más en las calles, ah sí claro, uno menos en el paro, uno menos a cobrar la pensión, un estorbo menos para muchos políticos que solo ven en lo económico lo triste de sus vidas...

Perspectivas

A veces las cosas se ven desde diversas perspectivas. Es bueno no quedarse nunca en una sola dirección. Es bueno no tener solo un objetivo para conseguir algo. Las metas se consiguen a través del esfuerzo pero también en la variación de opiniones y cuando vemos que respetamos la pluralidad también las metas se acercan más a nosotros y se hacen más asequibles. ¿Cuántas veces por no querer dar nuestro brazo a torcer se han malogrado opiniones que hubieran podido ayudarnos a llegar mucho más alto en el conocimiento de los demás?; porque sabemos que las perspectivas nunca son únicas, es por eso que existe la tolerancia y que ésta necesita convivir con nosotros mismos para saber hacer de ella una herramienta de futuro para que nunca nos sintamos dueños de una verdad absoluta que no existe. Tenemos dentro de cada uno un rayito de esperanza en el mañana y en el ser humano. Porque el día que perdamos eso, habremos perdido toda nuestra razón de ser, de actuar, de vivir en una palabra... Hay que mirar el mundo con una perspectiva diferente, con ojos de niño curioso y a la vez de joven y adulto con una crítica real constructiva para hacer de este mundo uno nuevo lleno de vida y plenitud humana...

Tal como vino, se fue...

La Semana Santa se ha ido tal como vino. Como cada año, sus días clave, el jueves santo, el viernes santo y el domingo de Pascua. Creo que son los días más importantes de cada semana santa. Encierran todo el misterio de la Pasión, muerte y Resurrección de Cristo. Ahí está la base de todo el cristianismo. El que puede creer todo lo que estos días significan y lo que cuentan que pasó, creo que tiene muy claro las raíces profundas del cristianismo y así se arraigan a la creencia de una resurrección, es decir, de una vida después de la vida, escrita, hablada y divulgada por un sinfín de autores que creen que eso es posible aunque no se haya demostrado nunca con un ser humano que vuelva de donde se supone que nadie vuelve. Otra cosa es la famosa luz que la gente que dice que ha tenido experiencias de ida y vuelta ha visto y luego se ha comprobado que la luz del quirófano era lo bastante potente como para parecer una luz parapsicológica. Hoy en día casi nadie vuelve de donde se fue. ¿Se habrá perdido el don de la ida y vuelta por estos mundos extraños que a ciencia cierta nadie conoce?. Si alguna vez estoy en ese trance no dudéis que si puedo también yo haré una escapadita a ver que tal me sienta...

Cuatro puntos tiene mi tierra...

¿Hasta cuándo Señor el mundo girará de acuerdo con sus ideales? o más bien sus puntos cardinales. Hemos perdido el norte, siempre nos habían dicho que el norte era un punto cardinal, nada que ver con la Iglesia, claro, y que el sol salía por el este, pero claro tampoco sabíamos si era este, ese, o aquel. Entre Benedetti y Serrat se han encargado de decirnos que el sur también existe, debe ser como Teruel, más o menos. El sol se esconde por el oeste, ¿es que verdaderamente juega al escondite con nosotros?. Los puntos cardinales han dado lugar a más puntos, como sureste, nordeste, etc, y estos han formado la rosa de los vientos, que no es de Chillida como el Peine sino que tiene una forma muy curiosa como de puntas que se unen unas con otras y así nunca sabes a que punta pertenece cada punto cardinal. Lo único interesante es cuando subes a una montaña de esas que tiene rosa de los vientos y te va indicando por donde o hacia qué dirección está cada pico que siempre están al fondo de todo y te lo tapa la niebla. Para todo esto lo mejor es comprarse una brújula que es como una viéjula montada en una escóbula y a seguir la flecha que así está el país de perdido...

Tapa las tapas por favor...

Una noche de abril como la de hoy he vuelto a abrir un baúl. El baúl del miedo a la oscuridad, del miedo al no saber, a la incertidumbre, el baúl que difícilmente se cierra cuando los temores son de un día sí, otro también. Ese baúl tiene dos cerrojos; una vez se abre uno el otro también se abre porque no son independientes. Así asociamos el miedo, la incertidumbre, el desconocer; lo unimos todo, y abrimos el baúl. Sé que es difícil de cerrarlo porque cuando ya se ha abierto una vez cuesta mucho más tenerlo cerrado sin pensar en los miedos, sin estar agobiado por la incertidumbre de los siguientes días. Es crucial el que pueda volver a cerrarse con naturalidad, sin forzarlo, porque si se fuerza es cuando luego no queda bien cerrado y el miedo y la incertidumbre escapan por sus rendijas. Asegurémonos de cerrar bien esos cerrojos. De apretar bien las tapas y no dejar que el miedo, la incertidumbre y el desconocimiento nos ganen la partida...

No quiero que os lo aprendáis de memoria...

Tres fechas clave son las que más están sonando estos días. Ramos, Jueves Santo, Viernes Santo y después resucitó. Está muy bien que un día sepamos historia de la religión pero que cada día se monte el folclore en la misma iglesia sinceramente es bastante patético. Digo yo, si costaría mucho reunir a los tropecientos niños y contarles la misma historia una sola vez, con el mismo folclore si uno quiere y con los mismos cantos decimonónicos, pero al menos en un día matas tres pájaros de un tiro que se suele decir. Cuando las cosas se hacen porque tocan y cuando las ideas ya no florecen y los signos son repetitivos y siempre los mismos como queriendo incidir diez mil veces en lo mismo es que estamos tocando fondo. No hay iniciativa. Solo pequeños atisbos de luz coartados por la mano que todo lo puede con el muro infranqueable de inmovilismo que representa, podrían hacernos ver la Semana Santa, que de por si ya es patética, como otra opción diferente dentro de la solemnidad atrofiada que nos rodea...